viernes, 20 de enero de 2017

¿Por qué no se capacitan los archivistas de Rep. Dominicana?


Es una pregunta que me hago continuamente, cuando visito archivos o más bien depósitos de papel. En efecto, si nos apegamos a la definición del Consejo Internacional de Archivos, "Los archivos son el conjunto de los documentos recibidos o constituidos por una persona física o moral, o por un organismo público o privado, resultando de su actividad, organizado en consecuencia de esta actividad y conservado en vista de una eventual utilización", realmente la mayoría de los "archivos" visitados no cumplen con esa definición.

Cuando se le pregunta al archivista de turno el por qué de la mala conservación, de la mala organización, sobre la ausencia de sistema de clasificación, en muchos casos no entienden las preguntas. Prácticamente ninguno sabe lo que es una tabla de valoración documental o un calendario de eliminación. Y si se le pregunta por los cursos que ha hecho, menciona algunos sin relación con los archivos. "No hay dinero para eso" dicen.

Las empresas, salvo raras excepciones, contratan jóvenes estudiantes, que solo esperan pasar a otro departamento. Están solo de paso en el archivo, enfocado a lo que llaman "su carrera", es decir lo que están estudiando en la universidad. Igual en las oficinas del Estado. A veces encontramos un(a) viejo(a) archivista, renuente a cambiar cualquier cosa y en especial a introducir la tecnología. Dirige el archivo como si fuera su propiedad, con procesos que no han cambiado en 20, 30 o hasta 40 años.

Ese artículo un poco amargo viene motivado por una reflexión que me hizo un conocido: "¿De que te sirve pagar cursos a tu gente?".

Bueno, señor mío, a mí me gusta rodearme de gente con la cual yo pueda "hablar", no de tonterías pero profesionalmente. Y como mi profesión es ser archivista, ese personal debe ser capacitado en Archivística y afines para poder trabajar en mi equipo y generar ideas.

Luego, señor mío, creo mucho en el sencillo hecho que capacitar el personal eleva el nivel de la organización. Por eso estoy muy feliz hoy de tener en nuestro equipo, dos personas formadas en Auditoria de SGD según las normas ISO 30300.

¿Cuesta? Claro que cuesta, pero recuerden que la capacitación es una inversión, no un gasto...